Siempre hay una primera vez para todo: Primer pastel de fondant!

Frase número 1 del día: ¡El mundo no es para los cobardes! 

Sí señoras y señores, en esta vida hay que lanzarse! ¡En esta vida hay que aceptar nuevos retos! ¡En esta vida hay que correr riesgos! Os preguntaréis el por qué de este discurso tan sumamente trascendental, no? Pues todas estas palabras tienen un significado: he dejado atrás los bizcochos de toda la vida, para dar un paso más en mi andadura por el mundo de la repostería, y adentrarme por fin en el maravilloso mundo del fondant.

Frase número 2 del día: Sin riesgo no hay gloria.

Llevaba ya un tiempo pensando en hacer mi primer pastel de fondant. De hecho, tenía guardado en mi armario "reposteril" unos paquetitos de fondant que no me atrevía a abrir por miedo a un fracaso estrepitoso. Porque seamos sinceros, las segundas partes nunca fueron buenas, pero es que las primeras partes pueden ser desastrosas! Más aún si no conoces la técnica y si no has hecho ningún curso (aunque estoy en ello, ya os mantendré informad@s). Pero después de visionar chiquicientos videos tutoriales del youtube y no perderme ningún domingo el programa del Rey de las tartas (programa americano total donde los haya, donde se realizan unas tartas ultramegavistosas, eso sí, la higiene brilla por su ausencia) me he armado de valor y he realizado mi primera tarta de fondant!

Frase número 3 del día: Si puedes soñarlo, puedes hacerlo. 

Cuando asumes un reto hay que tener confianza en uno mismo. Hay que poner ilusión en los objetivos que nos marcamos. Y en este caso la motivación para dar un nuevo paso "reposteril" ha sido el cumple de mi mami. No podía haber mejor ocasión para iniciar mi nueva etapa en el mundo de los pasteles que el cumpleaños de mi mamá. Las madres se lo merecen todo en esta vida, y la mía más! ¡Porque es la mejor madre del mundo mundial!

Así que este pastel ha sido diseñado con toda la ilusión únicamente para ella:

La técnica del pastel brilla por su ausencia: base de bizcocho de limón + crema de limón + base de bizcocho de limón + cobertura de buttercream + fondant. A todo esto le sumas: 5 mariposillas + 2 florecilias + hojas a tutiplén y ... voilà: ¡MI PRIMER PASTEL DE FONDANT!

Estoy contenta con el resultado. Prometo que mejoraré, seréis testigo de ello en un futuro, espero que no muy lejano.

Y hasta aquí mi primera incursión en el mundo del fondant. Me alegro de haberlo compartido con vosotr@s!

¡Hasta la próxima!